¿Qué Vainilla elegir?
La calidad de las vainas de vainilla tiene una notable variabilidad dependiendo de cómo se procesen. Para garantizar una vainilla de máxima calidad, es esencial practicar un cultivo cuidadoso. Dominar las técnicas de fertilización y recolectar las vainas cuando estén maduras son elementos fundamentales. Sin embargo, durante el proceso de secado (una hora al sol seguida de una hora a la sombra, durante cuatro meses) cada vaina reacciona de manera única. De hecho, algunas vainas de vainilla se volverán notablemente más secas que otras. El momento del envasado y clasificación se vuelve crucial para evaluar la calidad de cada vaina de vainilla. Hay varias gamas presentes en todo el mundo. El origen de la vainilla no está intrínsecamente ligado a su calidad. En realidad, la calidad de una vaina de vainilla depende de su nivel de humedad y de su concentración de vainillina. Existen 4 clasificaciones oficiales de Vainilla en el mundo: Gourmet, TK, Rojo UE y Rojo EE.UU. Entre estas, muchos distinguirán dos tipos de vainilla: las vainas de calidad A y los de calidad B. En realidad, no existe una clasificación oficial de las vainas de vainilla ni una organización de estandarización. Cualquiera puede afirmar que sus vainas son de calidad A o B. En general, este término se utiliza de manera arbitraria, ya sea para describir vainas que son negros, intactos y estéticamente agradables (Grado A), o para referirse a vainas que son marrones, desordenados y poco atractivos en apariencia (Grado B).